Encuentro de forma creciente tanto en la lectura y el estudio como en la
música parecido estímulo vital , sólidas razones de subsistencia que instalo en mi micromundo como un parche
a la crónica agitación e inquietud que soporto , una especie de
profilaxis a la repetición del ritmo de la vida
; expresiones directas del alma humana
que aunque no cambien las cosas abren puertas al que intuye algo verdadero en un mundo decididamente perverso, falso ,
tramposo y farsante ; algo de eso me
pasa con este disco que parece que llega
al fondo de la cuestión y que presagia de alguna forma la desaparición física de
Larry Jon Wilson .
En que estaría yo pensando , siento cierto bochorno , cierta
vergüenza por haber creido en el tiempo lo que hoy consta que era falso o quizá
no lo era entonces pero ha dejado también de ser cierto al no haber resistido ;
en este disco siento más verdades que tópicos , más vida intrínseca que otros
cuyo estéril preciosismo interpretativo no logra camuflar su farsa aunque nos entretenga el instante ; es
que aquí hay profundidad , honda
expresión de quien sufre la sensibilidad necesaria ante el proceso vital mismo y la comparte
en un momento que fue
absolutamente casual pues el permanecía volcado en su intimidad y totalmente desinteresado del negocio cuando
se hizo esta grabación.
Y eso que es una toma
que me resulta de muy difícil catalogación por su naturalidad y su siempre inquebrantable fidelidad acústica
; sin intención de ensanchar los límites
de su material añejo como hizo Rubin con el de Johnny Cash en sus esenciales American Recordings , pero consiguiéndolo igualmente ; ambos casos pertenecen a la América
profunda y se esfuerzan en narrar los rinconcicos ocultos o medio dormidos del
alma humana ; por eso su escucha es un placer individual que se torna universal.
Grabado de una sola toma , a pelo , tan solo es el hombre ,
el artista , y su guitarra ; un creador
potente a solas en una habitación de hotel en Perdido Key , Florida , que desgrana una tras otra algún cover
de otros viejos amigos forajidos ( en el sentido de que hicieron lo que les dio la gana al
margen del sistema pero muy fértiles
creativamente ) , alianzas de tres
canciones en una sola pieza y originales
escenificados de este verdadero clásico del
country soul espabilado en
Nashville que exigen escucha activa y atenta ; por lo mucho que ofrece entiendo que hay
que tomarlo sin prevención pues su
densidad puede hacer huir si se intuyen cercanas las profundidades , pero merece muy
mucho la pena acercarse hasta esta grabación
que destila una personalidad única ( tanto en ejecución como en contenido ) y una verdad
sin tópica metáfora que conecta
con cualquier oyente que se asome
al vacío y esté atento a su ya madura sensibilidad ; sí ,
la sensación última , y creciente es de
que llega al fondo de la cuestión en eso del agridulce del vivir ; increíble su
prácticamente inexistente presencia
comercial más allá del culto , en su
tiempo y en el nuestro .
La mentira exige
memoria férrea y capacidad de improvisación y fabulación ; la verdad la puedes
tocar y cantar aunque de ningún
modo la puedas articular intelectualmente ; hoy Larry Jon Wilson vuelve a echar un
cable en ese difícil trance de deshacerme
de mi inconsistencias y secretos , débiles voluntades e inconstancias , límites y venenos ; arquitectura compleja y
simple la de este cronista genuino al
que conocí casualmente solo llevado por la curiosidad y afán de documentación , un placer elegante
escucharlo ; y mira que en realidad no
tengo una opinión definida sobre casi nada
y tengo a veces dificultades para
distinguir lo figurado de lo cierto y lo
dicho de lo entendido , pero no puedo evitar
el recomendar que invites a Larry
Jon Wilson a una taza de café y te cante historias en el salón de tu casa ; un lujo privado.
No lo conocia Aire a lo Cash pero todavía más arido en el buen sentido. Me he quedado prendado con Shoulders
ResponderEliminarLa vida tiene estas cosas, que te encarcela y te enseña por los barrotes la flor más bella.
ResponderEliminarSencillamente inconmensurable, apreciado jesus.
ResponderEliminarY en la desnudez instrumental, se hace incluso mas grande si cabe.
He estado investigando a raiz del anterior post y he quedado prendado, Un millón de gracias por tan soberbio descubrimiento, dear jesus.
Como bien apostillas al final del comentario "un lujo privado".
Un abrazote.