domingo, 2 de febrero de 2014

LARRY JON WILSON El hombre y su guitarra




Encuentro de forma creciente  tanto en la lectura y el estudio como en la música  parecido estímulo vital  , sólidas razones de subsistencia   que instalo en  mi micromundo como  un parche  a la crónica agitación e inquietud que soporto , una especie de profilaxis a la repetición del ritmo de la vida  ; expresiones directas del alma humana  que aunque no cambien las cosas  abren puertas al  que intuye algo verdadero  en un mundo decididamente perverso, falso , tramposo y farsante  ; algo de eso me pasa con este disco  que parece que llega al fondo de la cuestión y que presagia  de alguna forma la desaparición física de Larry Jon Wilson  .
En que estaría yo pensando , siento cierto bochorno , cierta vergüenza por haber creido en el tiempo lo que hoy consta que era falso o quizá no lo era entonces pero ha dejado también de ser cierto al no haber resistido ; en este disco siento más verdades que tópicos , más vida intrínseca  que otros  cuyo estéril preciosismo interpretativo no logra camuflar  su farsa aunque nos entretenga  el instante  ;  es que aquí hay profundidad ,  honda expresión de quien sufre la sensibilidad necesaria ante el proceso vital mismo  y la comparte  en un momento  que fue absolutamente casual pues el permanecía volcado en su intimidad  y totalmente desinteresado del negocio cuando se hizo esta grabación.

Y eso que es una toma  que me resulta de muy difícil catalogación  por su naturalidad  y su siempre inquebrantable fidelidad acústica  ; sin intención de ensanchar los límites de   su material añejo  como hizo Rubin  con el de Johnny Cash en sus  esenciales American Recordings  , pero consiguiéndolo igualmente  ; ambos casos pertenecen a la América profunda  y se esfuerzan en narrar  los rinconcicos ocultos o medio dormidos del alma humana ; por eso su escucha es un placer individual  que se torna  universal.



Grabado de una sola toma , a pelo , tan solo es el hombre , el artista , y su guitarra  ; un creador potente  a solas  en una habitación de hotel en Perdido Key , Florida  , que desgrana una tras otra  algún cover  de otros viejos amigos forajidos ( en el sentido  de que hicieron lo que les dio la gana al margen del sistema  pero muy fértiles creativamente ) , alianzas  de tres canciones en una sola pieza y originales  escenificados de este verdadero  clásico   del country soul espabilado  en Nashville  que exigen escucha activa y atenta  ; por lo mucho que ofrece entiendo que hay que tomarlo sin prevención  pues su densidad  puede hacer huir  si se intuyen  cercanas las profundidades , pero merece muy mucho la pena acercarse  hasta esta grabación que destila una personalidad única ( tanto en ejecución como en contenido ) y  una verdad  sin tópica  metáfora  que conecta  con cualquier oyente que se asome  al vacío  y esté atento a su ya  madura sensibilidad   ; sí , la sensación última , y creciente  es de que llega al fondo de la cuestión en eso del agridulce del vivir ; increíble su prácticamente inexistente  presencia comercial  más allá del culto , en su tiempo y en el nuestro .

La mentira  exige memoria férrea y capacidad de improvisación y fabulación ; la verdad  la puedes  tocar y cantar  aunque de ningún modo   la puedas articular intelectualmente  ; hoy Larry Jon Wilson vuelve a echar un cable en ese difícil trance  de deshacerme de mi inconsistencias y secretos , débiles voluntades e inconstancias ,  límites y venenos ; arquitectura compleja y simple la de este  cronista genuino al que conocí casualmente solo llevado por la curiosidad  y afán  de documentación , un placer elegante escucharlo ; y mira que en realidad  no tengo una opinión definida sobre casi nada  y tengo a veces dificultades  para distinguir lo figurado de lo cierto y  lo dicho de lo entendido , pero no puedo evitar  el recomendar que invites  a Larry Jon Wilson  a una taza de café  y te cante historias  en el salón  de tu casa ; un lujo privado.


3 comentarios:

  1. No lo conocia Aire a lo Cash pero todavía más arido en el buen sentido. Me he quedado prendado con Shoulders

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  2. La vida tiene estas cosas, que te encarcela y te enseña por los barrotes la flor más bella.

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  3. Sencillamente inconmensurable, apreciado jesus.
    Y en la desnudez instrumental, se hace incluso mas grande si cabe.
    He estado investigando a raiz del anterior post y he quedado prendado, Un millón de gracias por tan soberbio descubrimiento, dear jesus.
    Como bien apostillas al final del comentario "un lujo privado".

    Un abrazote.

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